sábado, 22 de septiembre de 2012

VII Feria Gastronómica Corferias

Como otros años, en el Centro de eventos Corferias, se celebra la VII feria de gastronomía de Bogotá.
Evento grande, que ocupa 3 pabellones del recinto y con Francia como invitada especial este año.
Tambien están invitados, para impartir talleres los reconocidos chefs, Simon Bühler, Donato de Santis, Benito Molina y Solange Muris entre otros. Chefs que se dejaban ver por la feria y bastante accesibles para tomarse fotos con quien se lo solicitaba.
Con la entrada gratuita para el Viernes, nos acercamos a Corferias a ver que podiamos ver y aprender de una feria a priori muy interesante. Digo a priori, porque en lineas generales no me gusto mucho la feria, y según otra mucha gente, la opinión general fue esa.





No es para nada una feria mala, pero faltan mayores incentivos hacia el visitante.Recorrer la feria fue como salir a centro comercial, ver tiendas de alimentos, té, cerveza, restaurantes y poco más. Los talleres, aunque llevan a gente sobradamente preparada, no atrajeron el interés mayoritario de la gente, y parecía que la gente estaba allí para descansar un rato.Hablo del día viernes, supongo que el fin de semana la cosa se pondrá más interesante.
El pabellón de Francia, además de pequeño, era una colección de tiendas que vendían productos de dicho país, y unos talleres demostrativos de cocina. Poca cosa para lo mucho que puede aportar un país como Francia en materia de gastronomía.
Por otro lado, para nada fue todo malo.

Hay stands muy interesantes, con productos muy buenos, como unos deliciosos tés de diferentes sabores y origen, varios tiendas de productos italianos, típicos colombianos, españoles...
También se pueden probar dichos productos típicos colombianos, ya que hay todo un batallón de cocineras con sus ollas y sartenes, esperando dar la mejor de las bienvenidas a quien no conozca sus platos.
Fuera del recinto principal, se encuentra un pabellón dedicado a la panela. Desde información sobre el cultivo de la caña, su procesamiento y maquinaria necesaria, hasta la comercialización de la misma. Es un pabellón bastante "técnico", donde predomina la información sobre maquinaria, cosechas, recolección etc..pero interesante a su vez, sobre todo para quien no conoce nada sobre la panela.


























Y la verdad, poco más que contar. Entre los pabellones hay varios restaurantes de comida del llano, como es habitual con su mamona, chigüiro y demás carnes como plato estrella y amenizado todo con música de la región.
Y también varios puestos publicitarios de diferentes empresas de cerveza, agua, harina,queso...que reparten las respectivas degustaciones al visitante.












En definitiva , una feria normal para mi gusto, sin demasiados alicientes para regresar este año, pero que está muy bien organizada, ordenada y con mucha información. Pero como decía más arriba, personalmente me decepcionó un poco.

EL ARTE DEL TRANSMILENIO


Esta tarde, tras un muy buen entrenamiento en la Universidad Nacional y después de  unas cervezas con los compañeros de equipo, subí al Transmilenio con la idea de regresar a casa.
Primero hablaré brevemente del Transmilenio. Uno de los términos más utilizados en la capital, que se refiere al sistema de transporte masivo de la ciudad, tan odiado por muchos y querido por pocos.
Puesto en marcha a finales del año 2000, el sistema consta de una serie de vías diferenciadas de las del resto de tráfico  y un servicio de autobuses articulados, que circula por lo largo y ancho de la capital de la republica.
Como en todo en esta vida, el sistema peca de muchos errores, muchos, pero no se puede mirar solo lo malo, como hace mucha gente.
Para una ciudad con más de 7 millones de habitantes, más de 33 km de norte a sur y con una de las mayores lacras de cualquier sociedad, la corrupción, obviamente tiene que tener fallas en su sistema de transporte “público”. Tras ser uno de los transportes públicos más caros de Latinoamérica,  este mes se redujo el precio del billete y se hace más llevadero para la economía diaria.


El mayor problema que le veo al sistema, personalmente, más allá de la mala calidad de la calzada, de los a veces, insuficientes buses y a la malísima cultura del resto de conductores, es la utilización del sistema por parte de los usuarios. Tema muy polémico, pero me explico, sin querer justificar a los gestores, que son igual de culpables del colapso del sistema.
Pero bueno, dejando de lado este tema, el de los problemas y soluciones de las cuales hablaré a titulo personal en otro post, hoy quiero escribir sobre algunas situaciones que se pueden ver a diario en los buses.



De siempre he sido muy curioso, siempre observo a la gente, me los imagino en su día a día y no pocas veces me pregunto cual será su historia de vida.
Como pocas veces me ocurre, está vez viajaba sin música por la rotura de los auriculares de mi mp3, por lo que me senté a mirar y escuchar a mi alrededor.
Y así las cosas, con la música en otra parte, disfruté del viaje de menos de una hora escuchando la llamada telefónica del vecino de asiento.
Un señor de unos 40 años explicándole a su mujer-novia-amante-mama de sus hijos, el porqué de su tardanza en llegar a casa. El señor, con evidentes síntomas de ebriedad, le explicaba de la mejor manera posible, como había estado trabajando hasta tarde y justo cuando pasaba por la calle 80, el bus se había detenido por un gravísimo accidente de trafico en el cual estaban involucrados  2 coches con el resultado de 13 muertos nada mas y nada menos!!!!
Aguantaba la risa lo más que podía, al igual que el resto de los que estábamos alrededor, porque más allá de que el bus no pasó aun por la calle 80, el relato del accidente era muy poco creíble. Y para rematarlo todo, tras llorar, gritar y justificarse de mil maneras, el buen señor le pidió a otro señor que hablase con esa señora para confirmarle la veracidad de su testimonio.
El vecino se negó, aguantándose la risa una vez más, y así quedó todo. Colgó el teléfono a su señora, ignoró las siguientes llamadas de teléfono (supongo que llamadas de la misma señora, enojada) y se pasó de estación.
Aparte de esta situación, durante mis viajes diarios a clase en bus, he podido disfrutar de otras situaciones, algunas divertidas, otras embarazosas y otras muchas, desagradables.
De los desagradables, hablaré en el otro post dirigido a las fallas y mejoras del sistema, ahora solo contaré un par de anécdotas más, que pese a no ser divertidas en sí, nos sacaron una sonrisa a más de uno.
La primera me la contó un compañero de clase, y a los pocos días tuve la fortuna de vivirla por mi mismo.
5.15 horas de la mañana, el bus para en la estación del Campin, y tras la gente, se sube al bus un perro, visiblemente demacrado a consecuencia de su hábitat callejero. Se paró junto a la puerta, sin hacer el mínimo ruido y sin molestar a nadie. Cuando llegamos a la estación de Avenida Eldorado, se bajo y espero junto a nosotros al siguiente bus para hacer el transbordo a la estación de Paloquemao, en la cual se bajó y siguió su camino.
La última, la verdad sea dicha, no es algo bonito pero lo que nos sacó una risa fue la resolución del problema.
Cerca de las 2 de la tarde, por la misma ruta diaria y con el bus bastante lleno, escuchamos a una chica gritar e insultar a un señor. Asumiendo que el señor se sobrepasó con la chica (algo tristemente habitual en todo el mundo), escuchamos el reclamo de la misma:
“¿a usted le parece normal lo que hizo? ¿Tocarle un seno a una señorita? ¿Que pasaría si entra una mujer con cáncer de pecho? Y acto seguido pisó al señor con su tacón, bajándose del bus en la siguiente estación. Ante la incredulidad de todos, y cuando ya escuchaba alguna risa dentro del bus, el señor se puso a llorar ¡!!!! Jejejejejeje…merecido se lo tiene.

Y poco más por hoy, la verdad tengo muchas ganas de escribir sobre el sistema como tal, con sus errores, virtudes y puntos a mejorar, con testimonios y opiniones de usuarios, pero lo dejaré para otro día.

DE IGUAL MANERA LES DEJO UNOS LINKS PARA MOVERSE FACILMENTE POR EL SISTEMA:


Si quieres saber más sobre Transmilenio y otras curiosidades acerca de Bogotá y de Colombia, visita